Catitablet se llama, el proyecto puesto en marcha por la Iglesia católica de Angola en tiempo de la pandemia del Covid-19, para facilitar la lectura de los textos fundamentales de la Iglesia también en dispositivos móviles. En el marco del proyecto Catecismo en la tablet, el 4 agosto se presentó una versión de la Biblia y del Misal traducido en las lenguas Tchokwe, Luchazes, Lunda-Ndembo y Luvale, que se hablan en la parte oriental de Angola. «De esta manera – explicó Monseñor Jesús Tirso Blanco, obispo de Lwena – tendremos un instrumento específico para predicar el Evangelio también en las diferentes tribus y pueblos autóctonas». De hecho, empoderarse de los idiomas locales, permite a los sacerdotes «difundir la Palabra de Dios de forma más completa al interior de las comunidades».
La satisfacción por la nueva app fue expresada también por los fieles que la ven como «un precioso instrumento» para la evangelización y «una ayuda concreta para los catequistas que trabajan en las zonas más periféricas» del país africano, en la que viven más de 7mil personas de diversas etnias.
El reciente proyecto de traducción de los textos Sagrados no es el primero realizado por la Iglesia angoleña: ya en 2019 había traducido el Catecismo de la Iglesia católica en idioma Umbundu, el segundo más hablado después del portugués.