Según los datos recabados por la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre, en 2022 fueron asesinados en diversos países 12 sacerdotes y 5 religiosas, mientras que 42 sacerdotes y 9 religiosas fueron secuestrados.
En el mundo, las zonas donde los cristianos sufren mayor discriminación y a veces persecuciones se identifican en la vasta región de África. Particularmente en Sahel, en Chad, Níger, Malí, Burkina Faso y Nigeria, y nuevamente en el sur de Asia -India, Pakistán, Myanmar- y luego en Corea del Norte y China.
El director de la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre Italia, precisa que entre 2021 y el 2022 casi 8 mil cristianos fueron asesinados por odio a la fe, perseguidos porque el cristianismo contiene un núcleo de justicia social que no es agradable y provoca molestias a quienes militan en grupos para terroristas, yihadistas. Luego, en particular, asusta la actividad de los misioneros percibidos como pacificadores, los que construyen canales de diálogo y que están cerca de Occidente y a sus valores.