Un jubileo es siempre ocasión propicia para hacer memoria delcamino recorrido y para releer la historia de salvación que el Señor ha realizado a través de los eventos, situaciones y personas.
Las Hijas de San Pablo, presentes en Perú desde 1960, han dedicado todo un año a la celebración jubilar con iniciativas realizadas para «narrar» las maravillas realizadas por Dios a través de la obra de las hermanas que han implantado la semilla de la vocación paulina en esta tierra y de aquellas que a través de los años han contribuido al desarrollo de la misión.
Pero el jubileo ha sido también una ocasión para la Iglesia peruana, de expresar su gratitud a las FSP por el valioso servicio de apoyo a la acción eclesial de evangelización a través de la comunicación.
Los reconocimientos más significativos son dos: en enero de 2010 la Medalla de oro de San Toribio de Mogrovejo y el 22 de octubre, aniversario de la fundación, el Premio nacional cardenal Juan Landazuri Ricketts en «reconocimiento del trabajo que las Paulinas desarrollan para promover los valores humanos y cristianos en el ámbito de la comunicación social».
Fieles a tal compromiso, las Hijas de San Pablo han organizado, desde el 11 al 15 de octubre, un Congreso internacional sobre el tema Nuevos mesianismos en América Latina con el fin de ofrecer un aporte de estudio y reflexión sobre tales movimientos, a la luz de lo que ha sido el mesianismo en Israel y, sobre todo, el mesianismo de Jesús. Al encuentro han participado protagonistas del mundo social, cultural y religioso.
Al término del Congreso, las Paulinashan entregado la «Medalla Santiago Alberione» a personalidades institucionales y a cuantos se han distinguido por su trabajo en el campo de la comunicación social.
El año jubilar concluyó el 17 de octubre, en la Catedral de Lima, con una solemne Celebración Eucarística presidida por el Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne.