Oremos por las vocaciones

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail
A ti, Señor, nos dirigimos con confianza. 
Hijo de Dios, 
enviado por el Padre a los hombres 
de todos los tiempos y de todas las partes de la tierra, 
te invocamos por medio de María, 
Madre tuya y Madre nuestra:  
haz que en la Iglesia no falten las vocaciones, 
sobre todo las de especial dedicación a tu Reino.
 
Jesús, único Salvador del hombre, 
te rogamos por nuestros hermanos y hermanas 
que han respondido «sí» a tu llamada al sacerdocio, 
a la vida consagrada y a la misión. 
Haz que su existencia se renueve de día en día, 
y se conviertan en Evangelio vivo.
 
Señor misericordioso y santo, 
sigue enviando nuevos obreros 
a la mies de tu Reino. 
Ayuda a aquellos que llamas 
a seguirte en nuestro tiempo:  
haz que, contemplando tu rostro, 
respondan con alegría a la estupenda misión 
que les confías para el bien de tu pueblo 
y de todos los hombres.
 
Tú, que eres Dios, y vives y reinas 
con el Padre y el Espíritu Santo 
por los siglos de los siglos.   Amen.
(Juan Pablo II)
 
 

Allegati